Björk habla sobre la creatividad como un experimento que continúa

Tú colaboras con muchas personas, a menudo durante un período largo de tiempo. ¿Cómo encuentras un buen colaborador y qué crees que hace una buena colaboración?

Existe una historia diferente con cada colaborador. Es realmente como una amistad. Cada amigo que tienes o cada persona que hay en tu vida, hay una historia diferente para cada uno, y realmente lo siento así.

Para mí, lo que hace realmente lo diferencia es si es una colaboración visual o una colaboración musical. Me veo a mí misma como una cantautora. Quiero decir, cuando me siente en la mecedora cuando tenga 100 años, probablemente voltearé atrás a ver el lado musical de las cosas como si fuera mi trabajo.

Mis colaboradores musicales son menos, pero la conexión es probablemente más profunda porque no es sólo amistad, arte, juegos o hacer cosas. Mi ADN musical es como mi núcleo, ya sabes, y mi persona. Quien esté dispuesto a fusionarse con ese ADN musical, por lo general será algo que tarde más y dure mayor tiempo. Por supuesto, todo lo que voy a decir después de esto, lo va a contradecir.

Cuando se trata de Arca, Alejandro, él me contactó al final de Biophilia. Fue el momento perfecto porque era mi último concierto de Biophilia. Entonces llegué a conocerlo, personalmente, y realmente estar allí juntos. Eso fue lo primero que hicimos en Londres. Nos encontramos en la cabina de DJ y dimos una torna fiesta por cinco horas. Después llegamos a conocernos. Él primero vino a Islandia por unos días, y luego vino un mes, después por dos semanas-o, no recuerdo exactamente. Fue muy gradual, pero a medida que nos conocimos, era mucho lo que había allí. Alejandro tiene tantas capas, y es tan complicado y enorme, que era como que cada vez que sentíamos que habíamos hecho algo, era como otra colina para escalar.

También creo que tal vez la magia de esto es como si siempre esperábamos que nunca durara tanto tiempo. Sólo pensábamos siempre: “Ok, haremos una cosa más y eso es todo”. Nunca estuvo planeado.

Cuando se trata de cosas visuales, es diferente. Vuelvo a las raíces de mi banda, estando en una banda punk o siendo parte de un grupo donde era muy contrario a la autoridad. Era como una anarquía, y “todos son igual de importantes” y no hay tonterías del ego. Así que tal vez mis imágenes terminen siendo lo opuesto o algo así porque soy realmente extravagante, y hay mucho de mí allí. Pero yo creo que también provienen de ese núcleo, y que son muy colaborativos, especialmente cuando nos reunimos y hablamos a través de tratamientos. Además, sólo para publicar los videos, escribimos como 20 correos electrónicos grupales, y todos tendrán algo que decir. Como por ejemplo, con “The Gate”, fue un año de pláticas antes de que saliera a la luz.

Además, aunque estoy en todos los videos, me siento como un observador, sólo un ser humano, o algo así. Cuando hablamos de ideas, probablemente estoy más involucrada hablando sobre texturas y colores, y si trabajan con el ritmo de la canción o las texturas de las flautas. Lo que es más divertido para mí es el tipo lado astuto y directo. Mi papel en esto es a menudo como el último correo electrónico, o algo así.

Creo que las mejores conexiones o colaboraciones son cuando no asumes nada y no hay proyección y no hay presión y las personas no están forzadas contra la pared y les gusta: “Esto es lo que estamos haciendo”. Los pocos momentos en que nos hemos encontrado en ese tipo de situaciones, algo no estaba bien. Yo creo que donde la colaboración funciona de una mejor manera es cuando sueltas todo eso y tu realmente sólo comienzas desde cero y realmente intentas hacer algo diferente de lo que has hecho antes, e intentas encontrar algo igual, el cual no hubieras encontrado por ti mismo o con alguien diferente. Es ahí cuando es fértil.

Yo también creo que con mucha gente con la que trabajo, a veces es la tercera cosa o la segunda cosa que hacemos juntos lo que hace la conexión y antes de eso sólo es un juego previo. De alguna forma lo sabes. Es una sensación visceral. Creo que es similar a las amistades en las que estarás por cinco años o lo que sea, y luego sin duda, si todavía tienes esa conexión, pasarás como a la siguiente etapa, sea lo que sea.

Yo he encontrado que, por ejemplo, en los videos que Andy Huang y yo hicimos juntos. Comenzó con “Mutual Core” y “Black Lake” y “Family” y terminó con “The Gate”. No podríamos haber realizado “The Gate” como el primer video. Fue así como realmente crecimos juntos. Crecimos juntos de muchas maneras. Andy sólo había hecho un video antes de hacer “Mutual Core”. [risas] Han sido muchas cosas que hemos hecho juntos, y ha sido realmente, realmente como un sueño.

¿Está bien abandonar un proyecto?

Creo que, probablemente, en mi mente, nunca abandono una idea. Pero la realidad es que probablemente sí lo haga. Si pudiera describir mi punto de vista sobre eso: Tú no esperas que las cosas sucedan. No piensas: “Ok, en el transcurso de un año, va a ser este enorme emblema”. Trato de no suponer eso. Es más como que estoy agradecido por cada paso del camino. Das un pequeño paso, y le sigues, “Ah, ok”. Luego das otro pequeño paso, y dices, “ok”. Luego das otro paso…

Supongo que es mucho sobre los tiempos. Si no hay el próximo paso, y no se siente bien, definitivamente habrá momentos en que no lo haga. Pero en mi mente, no lo veo de esa manera. Es más como que si tal vez podría suceder dentro de un periodo de tiempo de 10 años. Tal vez podría suceder dentro de 50 años. Ese es el siguiente paso. O alguien más lo tomará, alguien más lo verá y los inspirará a escribir un poema. Lo veo más de esa forma, como si fuera algo que no me pertenece.

Es una energía que está ahí, especialmente en una colaboración. Trabajando por tu cuenta, creo que es algo diferente. Pero en las colaboraciones, es algo que no puedes controlar. Conoces a alguien y sientes muy rápido y muy pronto el potencial de lo que esto podría ser. Esto puede ser muy, muy, muy abstracto y no es algo que puedas poner en un calendario ni nada por el estilo, pero puedes sentir como la raíz escondida de la verdura debajo de la tierra [risas], y sabes de alguna manera la forma de la misma.

En el momento en que tus expectativas se consolidan o se cristalizan, lo conectas. No digo que siempre pueda hacer esto, pero si puedo quedarme más en el momento y estar agradecida por cada paso en el camino, es porque no estoy esperando nada, nada fue abandonado.

¿Te suceden bloqueos creativos o tienes suficiente empuje para hacer que todo funcione?

Bueno, creo que probablemente de lo que menos hablo es de aquello de lo que soy más protector, y así es como veo mi trabajo. Como, el 80% de ello es mi composición y mis canciones y mis letras y mis arreglos y mi producción que hago por mí misma, en mi computadora portátil, o salgo a caminar y fluyen mis canciones. Eso es algo que siempre está, es como un molino que se está revolviendo lentamente. No es rápido y no es lento. Es como, los momentos en que he estado en una isla, y se supone que debo escribir un álbum completo en un mes, yo nunca, jamás podría hacer eso. Escribo una canción al mes, o dos meses, pase lo que pase… Si hay un período feliz o si hay un período triste, o tengo todo el tiempo del mundo o no tengo tiempo en el mundo, es algo como que está hirviendo desde dentro.

Creo que parte de esto es que comencé a escribir canciones cuando era niña, caminando a la escuela y de regreso, y siempre fue como mi manera de afrontar o lidiar con el mundo. Nunca fue, para mí, algo que se suponía que existía en el resto del mundo o con amigos o en la escuela o en las listas o ventas de discos … o como se llame eso … interacción social.

Es casi como yo y mi misma, así que es como la luna llena, que viene una vez al mes. No cambia. Yo también creo que quizás porque estaba en bandas musicales desde los 13 ó 12, dependiendo de cuándo comienzas a contar, hasta los 27 aproximadamente, lo cual es un período de tiempo bastante largo. Eso es como 15 años. Creo que todo ese tiempo, era madre soltera, criando un bebé, y todo lo que hice fue escribir canciones y letras. Creo que eso se convirtió en algo que podía hacer mientras criaba a un niño o realizaba las compras, diligencias, o hacía una rutina normal de la vida diaria. Es como otra función en mi subconsciente, y en mi cerebro es como echar a rodar como un protector de pantalla, coexistir al lado de lo que esté sucediendo.

Cuando tenía 27 años y salió mi primer álbum como solista, ese tipo de compartimiento en mi psique se había desarrollado. Como cantautora, ese compartimiento para escribir canciones y escribir melodías en mí se había desarrollado desde que era niña. Primero por unos años y luego como 15 años en una banda, por lo que podía realizar cualquier cosa. Cuando hago giras locas o videos o simplemente saliendo con amigos o lo que sea que esté haciendo, eso fue casi, como si rodara en experiencias. No creo que haya creado las piezas allí, esas están siempre ahí.

Creo que mis bloqueos tienen que ver más con la interacción con el mundo o con asegurarme de que todas mis relaciones laborales están fluyendo… intentas entender a la gente y escuchar. Luego, en aceptar que a veces, algunas relaciones de trabajo tienen un reloj conectado a ellas. Es como una fruta. Es tiempo de cosecha, y eso es todo. Es realmente triste, pero así son las cosas. Sólo tienes que esperar que madures lo suficiente como para poder soltar cuando las cosas sucedan así. Creo que es ahí quizás donde más siento que están las piezas, o algo en lo que tengo que trabajar conscientemente.

¿Cómo encuentras espacio para ti y evitas agotarte?

Tal vez porque tuve un hijo muy joven, y tal vez porque soy cantante, simplemente siempre me cuidaba sola. Afortunada o desafortunadamente, dependiendo de cómo lo veas, escribo melodías muy ambiciosas para mí, así que no puedo hacer voces al estilo punk a todas mis canciones. Tengo que asegurarme de que mi voz mantenga todos sus registros, tanto los suaves como los fuertes, porque me gusta ser libre en mi voz. Es bastante difícil. Si sólo cantara fuerte todo el tiempo, eso no sería tan difícil, o si siempre cantara suave todo el tiempo, eso no sería tan difícil, pero me gustan los extremos. Me gustan las cosas suaves y fuertes y saltar de un lado a otro en la misma canción; para hacerlo eso vocalmente, siempre tuve que cuidar bien mi cuerpo.

Recuerdo haber estado en bandas de estilo punk, o lo que sea, como algunas de mis primeras giras musicales en algún sitio en la camioneta en Berlín o lo que sea, y lo triste que me sentía cuando perdí mi registro más alto. Simplemente sentí como: “Dios mío, voy a hacer el concierto y no será divertido. Puedo dar todas mis notas fuertes, pero no puedo tener sensibilidad o ningún detalle delicado.” Estaría realmente triste cuando eso me pasara a mí. Entonces, pienso desde el principio, aprendí un ritmo de cómo cuidarme, pero aún puedo volverme loca y perder la trama que hay en medio.

Pienso que también el haber tenido un hijo realmente joven, soy un poco de la vieja escuela. Salgo una vez a la semana, como el viernes por la noche. Luego, el resto de los días, soy bastante sensible. Sólo escucho mucha música y leo muchos libros, así que supongo que por esa razón siempre tendré ese estilo de vida, no ha cambiado mucho. De alguna manera se mantiene igual. Lo que es increíble de Reykjavik es que todavía estoy rodeada de todos los niños con los que crecí. Todos viven como a cinco cuadras a mí alrededor. Quizá han vivido cosas más extremas, como tal vez se han vuelto locos durante 10 años, y luego simplemente se vuelven totalmente limpios y sobrios. Nunca he tenido ese tipo de extremos… Ha sido lo mismo todo el tiempo.

Una respuesta rápida es: Es siempre una lucha. Siempre dices, “Oh, maldición, ahora no tengo nada que hacer durante dos días”, y siempre después, al final del segundo día, es como, “Chin, estoy aburrido”. Pero tienes que obligarte a hacer eso. Creo que para todos, eso siempre será algo con lo que tendrás que lidiar hasta el final de tu vida.

¿Cómo sabes cuándo se termina un proyecto? ¿Cómo decides cuándo termina una canción o cuándo terminas un álbum? ¿O es una de esas cosas en las que, incluso después de haberlo terminado, quieres seguir añadiéndole o seguir cambiando las cosas? O en tu mente, cuando algo se lanza, es como, “Bien, eso está listo. ¿Puedo pasar al siguiente proyecto?”

No sé por qué, pero eso nunca ha sido un problema para mí, yo sólo lo sé. Me gustan las cosas cuando no están completamente terminadas. Me gusta cuando salen los álbumes. Tal vez tiene algo que ver con estar en bandas. Pasamos mucho tiempo… Hubo al menos uno o dos álbumes que hicimos todas las canciones demasiado perfectas, y luego las cocinamos de más en el estudio, y luego vamos y las tocamos en vivo y están algo muertas. Creo que hay algo en mí, como un instinto, que no quiere el final, la versión sobre cocida del álbum. Quiero dejar las puntas abiertas u otras versiones, que es probablemente la razón por la que todavía acabo teniendo gente haciendo remixes, y cuando las toco en vivo, me siento diferente y las canciones pueden crecer.

Siempre habrá una canción en cada álbum, que quizás esté un poco cocida de más, pero está bien. Y, tal vez haya un par de ellas un poco crudas, y luego tomaré esas canciones algo crudas y tal vez más adelante durante su camino, haré una versión de eso. Como, digamos que escribo nueve canciones al año, luego mis álbumes salen cada dos o tres años. Si te fijas en los cálculos de eso, cada vez que sale un álbum, va a haber una canción vieja, y va a haber una nueva canción. Entonces sólo tienes que trabajar con eso.

Viendo hacia atrás ahora, una cosa que aprendí al no hacer mi primer álbum como solista hasta que tenía 27 años, fue intentar crear un flujo uniforme. Por ejemplo, no contengas la respiración durante cinco o siete años y no lances nada, y luego simplemente te obstruyes con demasiadas cosas. Creo que eso es lo que obtienes de eso. Tal vez hayas ganado algunas versiones inmaculadas y perfectas de algunas de las canciones, pero, en general, creo que hay más que perder con eso debido a cómo obstruyes tu propio flujo. Pierdes contacto con esa parte tuya, tu subconsciente, que está escribiendo canciones todo el tiempo, y la parte de ti que lo está mostrando al mundo. Habiendo tanta similitud entre esas dos partes de ti, creo, es mejor. Eso es más importante, para mantener ese flujo, que esperar hasta que las cosas sean perfectas.

Estaba pensando en la forma en que Kanye siguió ajustando la Vida de Pablo después de haberla lanzado.

Hay una parte de mí que quería lanzar Utopía sin todas las canciones de aves, simplemente más ágil. Una parte de mí quería lanzar dos versiones de la misma, como una muy limpia, con grandes silencios entre cada canción. Entonces está la otra versión, que lancé, y que es este tipo de viaje. Estamos tratando de hacer un viaje, que de alguna manera llegues a este lugar.

Iba a mantenerlo en secreto, pero desde que lo mencionaste, estoy algo tentada. [risas] Lo que estoy haciendo ahora es probablemente hacer una versión en vivo, donde quiero llevar las flautas más lejos, a un tipo de dominio acústico más virtuoso, y tal vez entonces me saltaré las aves.

Lo que trato de decir es que cuando lanzas un álbum, es importante mantener el flujo, y si tienes algo extra o nuevo, lo usas como combustible para tu próximo trabajo. Creo que eso es importante porque si te esperas otros seis meses o algo así, podrías perder impulso con tus canciones pasadas.

Cada vez que lanzas un álbum, habrá algunas canciones que son viejas y otras canciones que están crudas y otras están cocinadas de más. Creo que es más importante mantener el empuje andando y luego seguir adelante. Posteriormente hacer diferentes versiones de algunas canciones en situaciones en vivo.

En general, mis aficionados han demostrado mucho entusiasmo sobre cómo, cuando toco en vivo, hago diferentes versiones de las canciones, realmente diferentes. No hay necesariamente una versión correcta de cada canción. Es un experimento que continúa.